El gobierno estadounidense pide a Apple hackear a todos sus usuarios

Tim Cook sorprendió con la carta publicada en el web de Apple explicando por qué razón la empresa se negaba a crear una puerta trasera (backdoor) para desbloquear los iPhones.

Apple recibió una orden de un juzgado de California solicitando ayuda para que el FBI pudiera hackear el iPhone 5C de Syed Rizwan Farook, uno de los responsables de la matanza de San Bernardino, que le costó la vida a 14 personas el pasado 2 de diciembre.

La compañía ya estaba asesorando a los agentes de FBI en esta tarea y proporcionándoles toda la información requerida. Sin embargo, la nueva solicitud va más allá de lo permitido, aún en nombre de la Seguridad Nacional.

En la carta, Cook apunta que “el gobierno de los Estados Unidos ha exigido que Apple tome un paso sin precedentes, que amenaza la seguridad de nuestros clientes. Nos oponemos a esta orden, lo cual tiene implicaciones que van más allá del caso legal específico“. Además, explica que “este momento exige la discusión pública, y queremos que nuestros clientes y todos entiendan lo que está en juego”.

En concreto, la justicia estadounidense le está pidiendo a la compañía que desarrolle un programa para poder entrar al teléfono del acusado y revisar toda su información. En este momento, ni el FBI ni Apple ni el mismo Snowden pueden tener acceso a la información de este iPhone 5C. Debido a que el teléfono está bloqueado, la información está encriptada. Para desbloquearlo se requiere del password que el usuario determinó. Si alguien trata de desbloquear el iPhone más de 10 veces, éste se resetea y la información quedaría borrada. Por esto es tan importante para la justicia americana que la firma modifique el software iOS permitiéndole a un tercero entrar al teléfono y tener acceso a la información.

Dice Cook que “el FBI nos pide crear una nueva versión del sistema operativo del iPhone, eludiendo varias características de seguridad importantes, e instalarlo en un iPhone recuperado durante la investigación. En las manos equivocadas, este software -que no existe hoy en día- tendría el potencial para desbloquear cualquier iPhone en posesión física de alguien“.

Agrega Cook que “el FBI puede usar diferentes palabras para describir esta herramienta, pero no se equivoquen: la construcción de una versión de iOS que eluda la seguridad de esta manera sería sin lugar a dudas crear una puerta trasera. Y aunque el gobierno puede argumentar que su uso estaría limitado a este caso, no hay ninguna manera de garantizar este control“.

“El Gobierno sugiere que este instrumento sólo puede ser usado una vez, en un teléfono. Pero eso no es cierto. Una vez creada, la técnica podría ser utilizada una y otra vez, en cualquier número de dispositivos. En el mundo físico, esto sería el equivalente a una llave maestra, capaz de abrir cientos de millones de cerraduras -de los restaurantes y los bancos y las casas-. Ninguna persona razonable consideraría esto aceptable”, indicó el CEO de la empresa.

“El gobierno está pidiendo a Apple hackear a nuestros propios usuarios y socavar décadas de avances de seguridad que protegen a nuestros clientes -incluyendo decenas de millones de ciudadanos americanos- de los hackers y cibercriminales sofisticados. A los mismos ingenieros que construyeron el cifrado del iPhone para proteger a nuestros usuarios, irónicamente se les pediría que debiliten esas protecciones haciendo a nuestros usuarios menos seguros”, concluyó el ejecutivo.

En esta batalla legal son muchas las cosas que están en juego. Lo que suceda puede abrir una caja de Pandora con consecuencias inimaginables, sentando un precedente sobre la seguridad de todos, en Estados Unidos y a nivel global. Si existiese una puerta trasera para el FBI, en la práctica la seguridad del iPhone dejaría de existir. Los hackers podrían así entrar a nuestros teléfonos y robar toda nuestra información y el teléfono no sería seguro por más tiempo. Como prueba, ¿cuántas veces han sido hackeados los servidores del FBI?

Si Apple cede, los demás fabricantes, Samsung, Google, Microsoft tendrían que crear una puerta trasera para el FBI cuando éste lo solicite. Además, se sentaría un precedente para con otros gobiernos. ¿Qué pasaría si ya no es el FBI sino la KGB o la Agencia de Inteligencia de Brasil o el Ministerio de Seguridad Nacional de China el que hiciese la solicitud? ¿No tendrían ellos el mismo derecho en Rusia o en China o Corea del Norte, de exigirle una puerta trasera a Apple para tener acceso a los iPhones de sus ciudadanos alegando razones de seguridad nacional?

Cualquier dictador de cualquier país se sentiría en derecho de pedirle a Apple o a Google o a Facebook o a Amazon, tener acceso a la información de sus dispositivos, sean estos iPhones, nubes, servidores, laptops. Dilma Rousseff, Nicolás Maduro, Vladimir Putin, Assad o el mismo gobierno chino tendrían el derecho de pedirle a cualquier compañía acceso a la información para salvaguardar la supuesta “seguridad nacional” de sus países.

Si Apple cede, además, afectaría en su conjunto a la industria de tecnología y debilitaría la confianza que los usuarios tienen en que su información es segura y privada. ¿Dónde quedaría la sociedad de la información?

Edward Snowden en su cuenta de Twitter hizo una muy buena reflexión: “el FBI está creando un mundo donde los ciudadanos confían en Apple para defender sus derechos y no al revés“. Sundar Pichai, CEO de Google, también respaldó a Apple en su posición. Cook tiene mucha razón: “Poner en peligro la seguridad de nuestra información personal en última instancia puede poner nuestra seguridad personal en riesgo”.

La seguridad de todos y cada uno de nosotros está por encima del derecho del FBI de desbloquear un teléfono, así ésta información pueda conducir a encontrar pistas o culpables. En el momento en que ya no podamos confiar en que Apple asegura nuestra información, ya no queda nadie más en quien confiar. Y la verdad es que ya hace mucho tiempo dejamos de confiar en los gobiernos.