“La Ley Fintech de México es mejorable”: Andrés Fontao, cofundador de Finnovista

TyN Magazine desde el evento Finnosummit 2019, México.

Andrés Fontao lleva consigo una backpack mientras se desplaza por los pasillos y escaleras del Auditorio BlackBerry de la Ciudad de México, el sitio donde se celebra la Finnosummit México 2019, la conferencia referente de la industria fintech en América Latina. No tendría porqué hacerlo, pero así es como suelen conducirse aquellos emprendedores que han creado tal bagaje que es necesario llevar, al menos simbólicamente, una parte a la espalda.

Fontao es el cofundador y director asociado de Finnovista, la plataforma que impulsa el desarrollo de los ecosistemas fintech e insurtech en Latinoamérica, bajo cuyo amparo ambos sectores han experimentado un notable crecimiento en la región durante los últimos años.

Emprendedor nato, Fontao ha estado al frente de varias empresas relativas al ámbito de las telecomunicaciones y las finanzas tecnológicas, como son los casos de sus incursiones en Big Wireless, Valoris y Bankinter, a la vez que ha ejercido un liderazgo notable en la aceleración y el desarrollo de las llamadas startups, el cual continúa refrendando a través del Startupbootcamp FinTech, del cual también es fundador y director asociado. TyN Magazine conversó con él.

Tanto entusiasmo en los sectores fintech e insurtech asusta un poco. Me refiero a que todo lo que sube puede bajar…

Efectivamente hay un boom, hay mucha energía. Creo que la gran diferencia es que se puede medir, es decir, de los errores del pasado hemos aprendido algo, espero que podamos evitar esos errores que en su momento causaron el crash de las puntocom. Creo que la gran diferencia es el interés, el apetito, el deseo de los “incumbentes” de la industria, de acercarse para trabajar, colaborar, invertir, a comprar estas empresas.

¿Cómo describirías lo que está ocurriendo en la Finnosummit México 2019?

Lo que estamos viendo es básicamente un alineamiento de intereses de estos dos polos que históricamente han sido muy opuestos, el mundo emprendedor y el mundo ejecutivo. El hecho de que estén dispuestos ambos lados a acercarse y trabajar juntos, creo que va a ayudar a mitigar riesgos. Si a esto le sumamos otros elementos, como puede ser el marco regulatorio… hemos escuchado ya mucho de esta Ley Fintech que ha sido implementada en México, lo cual está estableciendo un marco que debería ayudar a mitigar riesgos. Y empezamos a hablar ya de la necesidad, y ojalá de un marco regulatorio, para las insurtechs. Y yo creo que todo esto viene de las lecciones aprendidas del pasado. Y ciertamente hay mucho ruido, mucha energía, pero hay una enorme oportunidad, y todas las partes involucradas lo ven.

¿Dirías que la diversidad de los emprendimientos que se han presentado estos días está marcada por la cultura millennial?

No creo que tiene que ver. Creo que la cultura millennial es una oportunidad, pero está complementada por otras oportunidades que existen en México y en América Latina. Más del 50% de la población, que no necesariamente es millennial, no tiene acceso a servicios financieros básicos, a una cuenta de ahorro, a un débito seguro, y son estos emprendimientos a través de la tecnología que estas personas olvidadas, excluidas históricamente, puedan empezar a tener acceso a servicios financieros básicos. Sí creo que la cultura millennial está estimulando un cambio de cultura, un cambio de pensamiento, desde dentro de la misma industria: está haciendo a las aseguradoras, los bancos, repensar los productos y la distribución también.

Dado el número de fintechs e insurtechs que han surgido en el país en los últimos tiempos, se diría que México es una fiesta. ¿Dónde están los demás países de la región?

México es una fiesta, Brasil es una fiesta, utilizando esa analogía, pero lo son porque son mercados con una enorme oportunidad. México tiene oportunidad, tiene escala, tiene talento, tiene sofisticación. Los otros países no están ahí todavía. Y es un problema también de infraestructura y emprendimiento. México y Brasil tienen ecosistemas emprendedores bastante desarrollados, tienen una mayor sensibilidad hacia el capital de riesgo y tienen una mayor sensibilidad y apertura hacia nuevas tecnologías.

¿Qué opinión te merece la Ley Fintech que recién se implementó en México?

Posiblemente es mejorable, pero el simple hecho de tener un marco regulatorio es un hito importante para México y para la región. Es un hito que trae certeza a diferentes actores de este ecosistema. Se piensa que va a llegar un momento, un día, en que desaparecerán la mitad de las fintechs, y eso no necesariamente es el caso, la ley fintech no regula a todas las fintechs. Tras esta primera fase habrá aprendizajes, y estoy seguro que todas las partes estarán abiertas a explorar mejoras que se puedan hacer.

¿En qué momento estamos en el desarrollo de la industria fintech?

Seguimos en un momento de crecimiento si bien vamos a empezar a ver consolidación. Consolidación a raíz de la Ley Fintech, pero también consolidación a raíz de la entrada de otros actores que ya han anunciado su llegada. Podemos esperar pasar de un periodo de fuerte crecimiento a uno donde vamos a seguir viendo crecimiento, pero a la vez una fuerte consolidación.

¿Cómo avizoras el futuro de la industria en cinco años?

Visiono una industria fuertemente consolidada, posiblemente con algunas fintechs que han adquirido entidades financieras tradicionales, algunas entidades financieras tradicionales que han comprado fintechs, pero donde el cliente, ya sea un consumidor o una pyme, tiene más y mejores servicios financieros.