Nuevo estudio: Innovación y disrupción en Latinoamérica

gA, compañía global en Digital Business Transformation, publicó “Ecosistemas digitales: Innovación y Disrupción en América Latina”, su segundo estudio sobre Transformación Digital.

Según Raúl Katz, Director del gA Center for Digital Transformation y co-autor de la segunda investigación del centro, titulada “Ecosistemas digitales: Innovación y Disrupción en América Latina”, “América Latina necesita de la digitalización para seguir creciendo económicamente y posicionándose en paridad con los países líderes de la economía mundial.  El proceso de transformación ocurrirá en primer lugar en aquellas industrias cuya estructura y cadena de valor sean más aptas para incorporar una digitalización disruptiva”.

El estudio señala que, para lograr una adopción exitosa de tecnologías digitales, es necesario que las empresas reorganicen sus procesos de negocio, restructuren su organización y capaciten los recursos humanos.

Los hallazgos regionales

En cuanto a la región latinoamericana, Chile y Colombia van avanzados en el  proceso de digitalización,  mientras que México ha comenzado de conjunto  a repensar el modelo de negocio en la era digital. De acuerdo con los casos presentados en el estudio, si bien las empresas reconocen las oportunidades de la digitalización, visualizan los cambios como riesgosos. En este contexto, el capital humano es fundamental para asegurar el éxito de las compañías y de la digitalización de sus procesos.

La investigación comprueba que las empresas líderes regionales marcan el camino hacia donde se pueden esperar cambios estructurales a nivel industrial: un líder de la disrupción empuja al resto de sus competidores a transformarse o desaparecer. Las transiciones se producen a través de dinámicas competitivas, en donde la inversión no es sólo tecnológica para lograr el valor real.

La asimilación gradual de tecnologías digitales es relevante para América Latina en varios niveles. Es por ello que, para que la productividad total de los factores aumente, es necesario que el proceso de digitalización se ejecute a lo largo de la matriz productiva en su conjunto, afectando primero a las industrias con altos costos de transacción y luego al conjunto del sistema productivo.

La digitalización de procesos productivos también incluye la asimilación de las nuevas tecnologías digitales en las cadenas de valor de sectores industriales, con el objetivo de incorporar métodos colaborativos en el diseño de producto y aprovisionamiento de insumos, ganar flexibilidad en la producción, y adaptarse a la transformación de canales de distribución.

Asimismo, la investigación señala que existen  tres maneras de digitalizar una compañía:

1)      Desde sus orígenes, es decir que la empresa nazca digital, lo cual implica pensar el modelo de negocio directamente en el entorno digital desde su creación.

2)      Afrontar la transformación digital desde adentro del negocio original, lo que implica transformar los procesos de toda la cadena de valor de manera secuencial, por lo general comenzando por los extremos de la cadena de valor.

3)      Crear una unidad digital independiente que se desprenda del negocio original de la compañía.

Las empresas que “nacen” digitales tienen el beneficio de poder pensar su modelo de negocio inicial en base a los parámetros competitivos característicos de Internet, respondiendo en muchos casos al concepto de plataforma de negocios. En el caso opuesto, las empresas que han nacido en un mundo “físico y analógico” enfrentan el imperativo de repensar los elementos fundamentales de creación de valor a partir de la incorporación de tecnologías digitales.