Openbank da el salto internacional: aterriza en Alemania, México y Argentina

Ana Botín, presidenta de la compañía, dice que “Openbank es la combinación de lo mejor de Santander y la nueva economía”. Tras Alemania, el banco digital llegará ya este año a Portugal y Holanda.

“Openbank es la combinación de lo mejor de Santander y lo mejor de la nueva economía”, resumió ayer Ana Botín, presidenta del grupo, durante el Media Day 2019, jornada que el banco digital de Santander realizó en Berlín para presentar el lanzamiento de su actividad en Alemania y dar el pistoletazo de salida a su expansión internacional.

Botín, en un acto donde pronunció un discurso en alemán e inglés y donde no aceptó preguntas de la prensa, incidió en el posicionamiento que Santander ha querido imprimir a Openbank desde su relanzamiento en 2017: Openbank es exponente de la banca digital, por donde pasa el futuro del sector, pero también de fortalezas de la banca tradicional como la confianza.

Openbank, que desde este verano ha venido operando en pruebas en Alemania, se abrirá al público en noviembre, según anticipó Ezequiel Szafir, consejero delegado de Openbank. El arranque se realizará con 5.000 usuarios, fundamentalmente público joven, inscritos en una lista de espera para acceder a sus productos y servicios.

Apertura de sucursal

Para iniciar su actividad en la primera economía europea, donde Santander tiene ahora una presencia fundamentalmente en consumo, Openbank ha solicitado licencia, aunque también abrirá sucursal. Permitirá que los clientes tengan un código de identificación (IBAN) alemán, lo que facilitará la operativa.

Según destacó Szafir, dos fortalezas que Openbank quiere explotar son el “foco obsesivo en el cliente” y su oferta comercial, con un abanico completo de productos (cuentas, pagos, depósitos, hipotecas, financiación al consumo, gestión de inversiones). “Somos un banco entero, pero sin sucursales”, dijo. Enfatizó como gancho el asesoramiento automatizado en inversión (robo advisor) desde 500 euros, un listón más bajo del que es habitual en Alemania (15.000 euros).

Según Szafir, todo ello eleva las ventajas competitivas de Openbank frente a otros bancos digitales, con una oferta limitada al mundo de los medios de pago. Además, los neobancos suelen estar bajo control de fondos de inversión y capital riesgo, con agresivos objetivos de rentabilidad en cinco años. “Nosotros formamos parte del Grupo Santander. Lo nuestro es la banca”, remarcó.

Szafir puso el foco en el carácter 100% digital de Openbank, que dispara su potencial de ahorro y eficiencia. Supone un plus en el actual entorno de tipos negativos. “Tendremos que ser más Openbank que nunca”, auguró.

Tras Alemania, Openbank también se abrirá al público este año en Portugal y Holanda. Allí, la entidad también está operando en pruebas. Szafir, que no aportó cifras de clientes, reconoció que en estos dos países las listas de espera son más modestas, si bien lo vinculó a que la actividad se inició más tarde.

Openbank ha pedido autorización para operar en todos los países europeos, de cara a tener sus puertas abiertas y poder elegir futuros mercados. Más allá de Europa, en 2020 llegará a Argentina y México. Se ha renunciado a Perú, por la lentitud de los procesos de autorización.

La punta de lanza es España, donde se han alcanzado 1,2 millones de clientes. El número medio de productos contratados por usuario es 4,6 productos, una vinculación “inédita”, dijo Szafir.

El crédito creció un 164% en 2018, lo que sitúa la cartera en 600 millones entre hipotecas y consumo. Openbank prepara el lanzamiento de un seguro para móviles. Los depósitos, por 9.200 millones, han aumentado un 8% desde cierre de año. En productos de inversión, foco del banco, el saldo son 1.200 millones.

Openbank ganó 3,2 millones hasta junio, un 10% más. Pero su cuenta de resultados se ve apoyada por diversa operativa intragrupo con Santander. Szafir insistió, con todo, en el valor intrínseco del proyecto: “Todo lo que hace Openbank es estructuralmente rentable”, concluyó.