Paneles solares, una forma de generar energía y ahorrar costos

Los paneles solares son una importante fuente de energía que día a día ganan mayor participación en la vida cotidiana.

Estos paneles, que permiten ahorrar un alto consumo de energía eléctrica convencional (un negocio que moviliza muchos millones) y colaborar con el medio ambiente, además permiten llegar a zonas geográficas de difícil acceso.

Por ejemplo en los EE.UU., más exactamente en California, se está desarrollando un programa destinado a la compra de paneles solares para familias con pocos recursos. En esta iniciativa política, las empresas deben abonar cierta cantidad de dinero por tonelada de dióxido de carbono y otros gases contaminantes que emiten a la atmósfera.

Lo recaudado, que hasta el mes pasado era de aproximadamente 14,7 millones de dólares, se utilizará para adquirir los paneles que permitirá a los hogares a los que se destinen ahorrar una gran suma de dinero en electricidad.

Este programa, dirigido por la organización sin ánimo de lucro GRID Alternatives, permitirá que a fin del año próximo, unas 1.600 familias tengan su panel de energía solar, y así ahorren entre 400 y 1000 dólares anuales.

También en Argentina, en la provincia de Salta, unas 1.000 familias que tienen sus viviendas en zonas rurales a las que es difícil de acceder por la zona geografía y que además no están próximos a los centros de distribución de energía convencional, podrán acceder a un sistema de provisión de energía eléctrica con paneles solares fotovoltaicos a través de su inclusión en el Proyecto de Energías Renovables en Mercados Rurales (PERMER).

Los hogares en los que se colocarán los paneles tendrán hasta 130 watts de potencia instalada, que servirán para la iluminación, comunicación y la carga de cargadores convencionales.

Además de los hogares, las empresas también los están adaptando. Toyota decidió incorporar en su nuevo campus en Texas, EE.UU., paneles solares planos que le generarán el 25% de la energía que consume allí. El panel solar Plano reducirá las emisiones de dióxido de carbono en 7122 toneladas métricas, o el equivalente de casi 1.000 hogares el consumo de electricidad durante un año.

Otro uso le da dará el fabricante es para algunos de sus automóviles. Un caso reciente es la nueva generación del Toyota Prius, que sumará placas fotovoltaicas en el techo, las que colaborará con la propulsión del vehículo en hasta un 10%.

Su uso será para recargar las baterías y distribuir energía suficiente hacia el grupo óptico, el climatizador y el sistema de levantavidrios cuando el auto está en marcha. Toyota sostiene que esto colaborará también en el aumento de la autonomía en modo 100 por ciento eléctrico, que llegaría a unos 50 kilómetros.