¿Quién liderará el futuro del automóvil?

La industria automotriz se encuentra en una etapa de cambios sin precedentes basados en la inteligencia artificial, la conectividad de banda ancha -especialmente el 5G- y la gestión de la energía impulsan a las empresas autotech en la carrera hacia el coche eléctrico y autónomo. Por otro lado el concepto de movilidad está cambiando en las grandes ciudades, donde la idea de ser propietario de un auto ya no tiene tanto peso como antaño, cosa que se ve reflejada en la aparición del Car Sharing que cada vez toma más cuerpo en las grandes ciudades donde moverse con auto propio ya no es tan beneficioso.

Autotech dio a conocer un repote: The Mother of All Tech Battles elaborado por el banco de inversión GP Bullhound, quienes ven que las grandes tecnológicas, “Cuentan con una ventaja clara en términos de escala: tienen mayores beneficios y crecen más deprisa, y su capitalización agregada es casi diez veces superior a la de las empresas automotrices. Por ello, tienen una mayor capacidad para financiar proyectos de investigación y expandirse a nuevas áreas”, explican los autores de este informe.

Alphabet cuenta con Waymo, su propia unidad de coche autónomo, y ha invertido en compañías como Lyft o Lime. Apple, que también trabaja en un proyecto de coche sin conductor, tiene su sistema de entretenimiento CarPlay, ha invertido en Didi y ha adquirido start up de movilidad como Mapsense o Perceptio. Intel pagó 15.300 millones de dólares por la empresa israelí de tecnología para el coche autónomo Mobileye; mientras que Samsung adquirió por 8.000 millones de dólares Harman para tomar posiciones en el vehículo conectado. De esta manera, estos gigantes tecnológicos lideran el ránking de operaciones del sector autotech de los últimos dos años.

Por su lado las empresas automotrices tienen planes agresivos que contemplan, inversiones, fusiones y adquisiciones. “Siguen teniendo la relación con el cliente y experiencia de años en la comercialización de los vehículos”, señala Miguel Kindelán, responsable en España de GP Bullhound.

Volskwagen ha comprometido inversiones de 44.000 millones de euros en el coche eléctrico y autónomo hasta 2023; Ford se ha marcado el objetivo de lanzar 40 nuevos modelos de vehículos eléctricos antes de 2022, y Toyota espera lograr un nivel cuatro de autonomía en algunos coches en 2020. Kindelán destaca la estrategia de Seat, que acaba de presentar en el MWC su propuesta de coche para la movilidad urbana y su concepto de automóvil conectado 5G junto a Telefónica.

Este mercado en ebullición se traduce en una creciente actividad de fusiones y adquisiciones dentro del autotech. El año pasado, se cerraron 166 transacciones, más del doble que en 2014. Entre ellas, la compra por parte de Didi de 99 Taxis o la adquisición de Mobike por Meituan. Europa es el mercado más activo, puesto que congrega el 39% del total de transacciones. Sin embargo, en términos de valor supone un 7%, lo que refleja las dificultades de las start up de autotech europeas para escalar.

Kindelán señala que España es un mercado interesante en uno de los segmentos de esta nueva era: la movilidad compartida. “Estamos viendo un gran despliegue de estos esquemas en grandes ciudades españolas, que son punta de lanza en Europa”, explica. Las escasas barreras de entrada y el hecho de que sea un sector poco intensivo en capital explican el boom de compañías en el ámbito de la micromovilidad, como las bicis o patinetes compartidos. “Es un momento de prueba y error en un sector muy inmaduro. Iremos hacia una concentración”, pronostica.