¿Un robot podría hacer su trabajo? Definitivamente, sí

Un estudio sobre El Futuro del Empleo del Foro Económico Mundial prevé que 5 millones de puestos de trabajo se perderán antes de 2020, a manos del avance de la inteligencia artificial, la robótica, la nanotecnología y otros factores socioeconómicos que reemplazarán la necesidad de los trabajadores humanos.

Esos mismos avances tecnológicos también crearán 2,1 millones de nuevos puestos de trabajo. Pero los obreros y empleados que consideran que se encuentran fuera de esta tendencia es probable que carezcan de las habilidades necesarias para competir por los nuevos empleos. La mayoría de los nuevos puestos de trabajo estarán en áreas más especializadas como la informática, las matemáticas, la arquitectura y la ingeniería.

La investigación insta a gobiernos y empleadores de todos los sectores a reeducar y recalificar a los trabajadores actuales para evitar una crisis.

Los gobiernos y las empresas deberán tomar acciones urgentes y específicas lo antes posible, para gestionar la transición a corto plazo y generar una fuerza de trabajo con habilidades a prueba de futuro. Solo así se puede hacer frente al creciente desempleo y la desigualdad, de acuerdo con Klaus Schwab , Fundador y Presidente Ejecutivo del Foro Económico Mundial.

Nuevas capacidades para nuevas economías

Entonces, ¿cuáles son las habilidades que deben adquirir los trabajadores para asegurarse de que tienen valor, a medida que la cuarta revolución industrial acelera su ritmo? Algunos pueden sorprenderse al saber que las habilidades que desarrollamos en la enseñanza preescolar serán muy valoradas.

David Deming, profesor asociado de Educación y Economía en la Universidad de Harvard, sostiene que las habilidades blandas como el intercambio y la negociación serán cruciales. Dice que el lugar de trabajo moderno, donde las personas se mueven entre diferentes funciones y proyectos, se asemeja mucho a las aulas de preescolar, donde se aprenden las habilidades sociales como la empatía y la cooperación. Junto con esas habilidades sociales, la capacidad matemática será enormemente beneficiosa.

En declive los puestos de trabajo con habilidades únicas

Deming indica que en los últimos años se han automatizado muchos trabajos que requieren habilidades matemáticas únicas. Cajeros de bancos y estadísticos han sufrido. Roles que requieren predominantemente habilidades sociales (trabajadores de cuidado de niños, por ejemplo) tienden a estar mal pagados, ya que la oferta de trabajadores potenciales es muy grande.

El estudio muestra que los trabajadores que combinan con éxito las habilidades matemáticas e interpersonales en las economías basadas en el conocimiento del futuro deben encontrar muchas gratificaciones y oportunidades lucrativas.

Educación para la reorientación

El desafío ahora, según Deming, es para los educadores, que deben complementar la enseñanza de habilidades técnicas como las matemáticas y la informática, con especial atención a asegurarse de que los trabajadores del futuro tengan las habilidades blandas para competir en el nuevo mercado de trabajo.

 

El presente artículo es una traducción y adaptación de un post del blog del WEF, escrito por Simon Torkington