WiFi en el cielo, la apuesta de Inmarsat para este año

Inmarsat aspira a lograr un espacio importante en la oferta de conectividad de banda ancha para los aviones este año, a partir del lanzamiento comercial de su servicio comercial GX Aviaton. Mediante tres satélites, la empresa ofrece cobertura global para que las aeronaves ofrezcan nuevos servicios a sus pasajeros. En este caso, se trata de acceso a Internet mediante conexiones WiFi, que pueden alcanzar los 50 Mbps.

En origen, la compañía estaba orientada al mercado de conectividad de barcos. Pero desde hace 25 años atiende al sector aeronáutico. Con sus servicios, la aviación se beneficiaba de comunicaciones para los pilotos. La tecnología fue evolucionando, hasta llegar a la cuarta generación satelital de Inmarsat. En la actualidad, 16.000 aviones en el mundo cuentan con equipamiento de Inmarsat de diferentes generaciones.

El servicio GX Aviaton se compone de tres satélites que ofrecen cobertura global en banda Ka. La señal que emiten es recibida por los aviones que la distribuyen internamente mediante WiFi. La red ofrece hasta 50 Mbps por cada haz que irradia el satélite y cada uno cuenta con 80 haces.

“En diciembre de 2015 entró en funcionamiento la red. Este año será el de la difusión e instalación de equipos en los aviones”, comentó el ejecutivo. Por lo pronto, GX Aviaton está funcionando a prueba en algunos aviones, con la autorización de las autoridades de aviación de Europa y EEUU. “A mediados de año se lanza el servicio con Lufthansa y varias compañías. Este año operarán de manera comercial los equipos”, explicó a TyN Magazine Raymundo Villar, director regional de Aviación en Latinoamérica de Inmarsat

Cada línea aérea tiene la posibilidad de elegir el esquema de comercialización. Puede ser en alianza con un operador de telecomunicaciones, o de servicios aeronáuticos. “Dependerá del modelo de negocios de cada aerolínea, incluso puede ser gratis, como herramienta de fidelización y diferenciación. Inmarsat es un aliado tecnológico para las partes”, señaló Villar.

Las líneas aéreas pueden establecer diferentes políticas comerciales, con diferentes paquetes, por tiempo de conexión o por viaje por ejemplo. “Es un servicio de valor agregado que puede aplicarse a viajeros frecuentes y clase ejecutiva; también pueden solventar el servicio mediante patrocinadores”, indicó el ejecutivo. “Todo dependerá del servicio. Por ejemplo, la mensajería podría tener un costo muy bajo o incluso gratis para determinados viajeros; el streaming debería pagarse por los recursos utilizados”, agregó.

La cobertura de las señales satelitales se puede redireccionar dependiendo del tráfico. Si se detecta demanda puede asignar hasta el triple de capacidad de conectividad. “Entendemos que el tráfico variará dependiendo de las rutas aéreas. Consideramos que es un servicio que será utilizado para aquellas rutas diurnas, de viaje de negocios, donde el pasajero puede atender sus asuntos mediante la conectividad. En este sentido, estimamos que las rutas regionales serán más demandantes que las transoceánicas”, concluyó el ejecutivo.