China obliga instalar una ‘app’ espía a sus ciudadanos

Radio Free Asia, una emisora privada sin ánimo de lucro centrada en el mercado pan-asiático y respaldada por el gobierno de Estados Unidos, informa que el gobierno central de Pekín ha llevado más allá aún las restricciones a los derechos civiles en la provincia autónoma de Xinjiang.

Los ciudadanos de Xinjiang, en su mayoría de etnia uigur o kazaja, a diferencia de la etnia Han del resto del país, y de religión musulmana, están siendo forzados a instalar una aplicación en sus smartphones llamada CleanWebGuard que les permite contactar con las autoridades de forma rápida. Actualmente el gobierno ya ha detenido 10 ciudadanas de esta región por mensajear temas sobre los cuales no hay discusión.

El gobierno para asegurarse que todos lo tengan instalado tiene agentes de policía en la calle que hacen chequeos sorpresivos a los ciudadanos. La aplicación extrae la geolocalización de los usuarios, copia mensajes de WeChat, analiza los videos e imágenes enviadas a través del mismo.

El gobierno respalda su actitud explicando a los ciudadanos que es para su protección ya que a través de esta plataforma busca contenidos extremistas y terroristas.

Muchos ciudadanos chinos, turistas y trabajadores inmigrantes utilizan servicios de conexiones privadas virtuales para evadir la censura del país y así poder acceder a servicios bloqueados en el país como Gmail, Netflix, YouTube, Facebook.

En 2018 el gobierno Chino pondrá fin a esta práctica para usuarios individuales activando filtros más rigurosos en el aparato estatal de censura digital. Las grandes empresas de telecomunicaciones chinas: China Mobile, China Unicom y China Telecom están controladas por el gobierno.

La inmensa mayoría de la censura, se realiza de forma interna desde las empresas, pero las reglas son impartidas por el gobierno Chino quién utiliza los presupuestos para controlar las empresas públicas, pero también los flujos de crédito de los bancos para mantener bajo control a las empresas privadas e inversores.

Las empresas externas, no pueden entrar en el mercado chino con aplicaciones o servicios populares que puedan crear un canal de comunicación con el mercado internacional. Por esto, Google o Facebook apenas cuentan con una presencia mínima en el país, siendo Microsoft la que tiene un campo un poco más amplio. Solo dos empresas tienen una presencia un poco más importante en el mercado chino, Apple y Amazon, pero a una distancia sideral de su presencia en el mercado mundial.