FMI: España al borde del colapso económico

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha alertado de la que la recuperación económica en España “corre peligro” ante la segunda oleada de infecciones por Covid-19, por lo que ha recomendado al Gobierno mantener las medidas de apoyo a los ciudadanos y las empresas, según han especificado los técnicos del organismo en las conclusiones de su revisión anual de la economía española, conocida como ‘Artículo IV’.

El FMI explica que la pandemia de coronavirus ha afectado “profundamente” a la población y a la economía españolas, y aunque el “apoyo ágil y decidido a la liquidez y al mantenimiento de rentas” por parte del Gobierno, combinado con la relajación de la política monetaria del BCE, ha constituido “importantes balones de oxígeno”, las expectativas de repunte del PIB pueden saltar por los aires.

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En opinión del FMI, “las perspectivas están sujetas a una incertidumbre sin precedentes”, y España debe tener en cuenta que en el corto plazo el repunte de la actividad “dependerá en gran medida de la contención de la crisis sanitaria”. El organismo calcula que el PIB se contraerá un 12,8% este año debido a la pandemia, mientras que para 2021 estima un crecimiento del 7,2% apuntalado por los fondos europeos y sus efectos de generación de confianza. Aunque se muestra tajante al respecto: “Lograr dicho repunte estará estrechamente vinculado a la capacidad de limitar nuevas infecciones”.

A medio plazo, dice el Fondo, se espera que “la demanda externa apoye cada vez más el crecimiento” a medida que se recuperen las exportaciones y que vuelvan a España “un mayor número de turistas extranjeros”, aunque la producción “tardará varios años en alcanzar su nivel pre-pandemia”.

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“La incertidumbre acerca de las proyecciones a corto y medio plazo es muy elevada. Los riesgos se decantan marcadamente a la baja”, remarca el FMI, que señala que “un fracaso a la hora de controlar nuevos brotes, un progreso más lento que el previsto en materia de vacunas y tratamientos, un Brexit sin acuerdo y una escalada de las tensiones comerciales podrían empañar aún más las perspectivas” tanto para la economía española como para la europea.

¿Qué debe hacer España?

Para evitar el peor de los escenarios España debe seguir trabajando para preservar la salud de la población, porque es “máxima prioridad”, pero también mantener las medidas de apoyo de política económica, que a juicio del FMI “siguen siendo esenciales a corto plazo”. “Las medidas fiscales tienen que continuar centradas en superar la crisis sanitaria y económica inmediata y contener el riesgo de que la recesión se transforme en estrés para el sector financiero, con costes reales y sociales todavía más elevados”, señala.

Las medidas de apoyo en materia de política económica “siguen siendo esenciales a corto plazo”, ha subrayado el FMI, aunque ha insistido de nuevo en que deben “prolongarse y adaptarse de manera flexible”. De esta forma, ha recomendado prorrogar el “exitoso” régimen de expedientes de regulación de empleo (ERTE), particularmente para los sectores más afectados.

“Las autoridades se enfrentan al tremendo desafío de mantener la agilidad y la previsibilidad de sus acciones de modo que estas ayuden a reducir la incertidumbre económica. En caso de producirse un acusado deterioro de las perspectivas económicas, deberían estar dispuestas a intensificar temporalmente el apoyo en función de las necesidades derivadas de la pandemia”, ha indicado el organismo dirigido por Kristalina Georgieva.

Ingreso mínimo

Este punto es importante para el FMI, pues considera “probable” que aumente la pobreza, dado que las personas con contratos de trabajo precarios, muchas de ellas jóvenes, con escasa cualificación y empleadas en los sectores más afectados, han sido quienes han sufrido un “mayor impacto”. Así, el organismo ha valorado de forma positiva la figura del Ingreso Mínimo Vital (IMV).

Por otro lado, la institución también ha recetado a las autoridades ampliar los programas de vivienda social de alquiler, de asistencia al alquiler y la reubicación, y “simplificar” la normativa de edificación y recalificación de suelo con el objetivo de “mejorar la asequibilidad” del alquiler.