La Unión Europea acusa a Qualcomm de prácticas comerciales ilegales
Los reguladores antimonopolio de la Unión Europea acusaron a Qualcomm de abusar de su poder en el mercado para dejar afuera a sus rivales, colocando el mayor fabricante del mundo de chips para teléfonos móviles inteligentes en una situación que podría generarle una fuerte multa.
Las acusaciones de la Comisión Europea se relacionan con los últimos problemas por prácticas antimonopólicas de la empresa en Estados Unidos, China, Japón y Corea del Sur, los que quedan demostrados en su modelo de concesión de licencias y sus patentes dominantes en las redes y dispositivos móviles.
La comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager, fue quien envió los dos pliegos de cargos contra Qualcomm. El fabricante estadounidense ahora tiene varios meses para defenderse y de ser hallado culpable, podría tener multas de hasta el 10% de su facturación mundial, que supera los 26.000 millones de dólares.
En cuanto a estas acusaciones puntuales, la Dirección General de Competencia señaló en el primer pliego que la multinacional realizó “pagos significativos” a uno de los grandes fabricantes de teléfonos móviles para que utilice en forma exclusiva sus chips. Estos pagos ilegales se estarían realizando desde el año 2011, con lo que desde ese momento estaría perjudicando a los competidores.
El segundo pliego de cargos acusa a la empresa de llevar a cabo entre 2009 y 2011 una política de precios “predatoria”. Esto es vender por debajo de los costos con el objetivo de frenar la competencia en el mercado.
“Estas acciones de Qualcomm pueden haber sacado del medio a los competidores o impedirles la competencia”, dijo Vestager en un comunicado.
“Esperamos demostrar que la competencia en la venta de chips inalámbricos ha sido y es fuerte y dinámica, y que las prácticas de venta de Qualcomm siempre han cumplido con la legislación europea de competencia”, dijo el consejero general de Qualcomm, Don Rosenberg frente a estas acusaciones.