Portabilidad numérica: Empresas más competentes

(Latinoamérica) Finalmente la promesa del número propio llegó a puerto. Una de las propuestas de más rápido cumplimiento en los últimos diez años que, entre líneas, desafía a las empresas de telefonía.

Partiendo por el principio, portabilidad numérica significa ser propietario de un número móvil o fijo –incluso del código de servicio de voz sobre Internet- sin comprometerse con un prestador.

Esta positiva “infidelidad” de los usuarios, sitúa irremediablemente a las empresas en un escenario incierto puesto que puede tener un impacto negativo en muchas pequeñas y medianas empresas que están utilizando servicios de Telefonía IP.

¿Por qué? Lo que actualmente ocurre es que las empresas soporten sus llamados en prestaciones que le ofrecen llamados a un menor costo. En términos simples: el prestador contrata 100 planes on-net con distintas compañías, traspasando este servicio a sus clientes. En palabras menos complejas aún: la portabilidad numérica aniquila esa posibilidad, pues impide que los planes on-net se establezcan.

Los alcances del servicio de portabilidad numérica no quedan del todo claros, pues al contrario, se introduce incertidumbre al no saber con precisión cómo se administrará la base de datos de los teléfonos a las compañías.

En lo concreto, falta el reglamento que regula el organismo que mantiene el registro de números. Tampoco está claro si los proveedores de VoIP tendrán acceso a esta base de datos introduciendo un grado de incertidumbre en el sector.

¿Qué pasará entonces con las pequeñas y medianas empresas que utilizan el servicio de negocio telefónico para bajar costos?

Sin embargo, basados en la experiencia de implementaciones exitosas de este sistema –tales como en Brasil, México y Perú, entre otros países de la región-, podemos ser optimistas. Este idilio de mantener el número en el vertiginoso libre mercado ha sido una de las normativas más esperadas por los consumidores chilenos, y también uno de los más importantes hitos para el sector de telecomunicaciones en el último tiempo.

Este acontecimiento que iniciará su implementación técnica a mediados del próximo año, marca la cuenta regresiva para que las empresas comiencen a planificar la optimización de sus soluciones para competir sobre tablas que le demandarán aventurarse aún más en la innovación tecnológica del siglo XXI.

Por Maurice Fellay, Socio Gerente de Strada Comunicaciones: