Twitter y Facebook: acusan a China de desinformar acerca de las protestas en Hong Kong

Luego de que Pinboard, el sitio web de marcadores sociales que dirige el empresario y crítico social Maciej Ceglowski, denunciara que Twitter estaría recibiendo dinero por parte de la agencia china de noticias Xinhua para promover tweets en los que se describe a los protestas que han tenido lugar en Hong Kong en los últimos meses como violentas, la red social con sede en San Francisco, California, acusó al gobierno de Beijing de estar instrumentando tales tácticas con la intención de socavar la legitimidad del movimiento. Facebook, la red social fundada por Mark Zuckerberg, acusó la misma actitud y se sumó a la defensa de Twitter.

Pese a que Twitter y Facebook están prohibidas y no tienen despliegue en China, existen cuentas originadas en esa nación que en las últimas semanas han descrito al punto de la histeria las protestas que han tenido lugar en Hong Kong como extremadamente violentas. Ambas redes sociales aseguraron que habrían dado de baja tales cuentas, en lo que sería la primera ocasión en que dos plataformas de social media retiran cuentas asociadas a actos de desinformación promovidos por China.

En un comunicado Twitter aseguró haber removido 936 cuentas, a la vez que desterraría a los medios de comunicación chinos que promovieron tweets pagados, en su servicio de publicidad, en los que se sugería que las protestas habrían sido auspiciadas a partir de los intereses de Occidente y, en ese sentido, descritas como “muy violentas”.

Facebook, por su parte, dijo haber eliminado siete cuentas, tres grupos y cinco suscripciones más asociadas a la campaña de desinformación en torno a las protestas que desde el pasado mes de marzo han tenido lugar en Hong Kong.

“Estas cuentas fueron deliberada y específicamente creadas para tratar de sembrar una discordia política en Hong Kong, lo cual implica debilitar la legitimidad y la posición política del movimiento disidente”, acusó Twitter en un comunicado. “Basados en nuestras investigaciones, tenemos evidencia confiable para afirmar que se trata de una operación apoyada por el estado”.

A diferencia de lo que ocurre en la República Popular de China, donde excepto de manera subrepticia es imposible acceder a ellas, en Hong Kong las redes sociales Twitter y Facebook están permitidas y gozan de la aceptación de más de cinco millones de personas en conjunto.

El conflicto está inscrito en los bordes de la guerra comercial que sostienen en la actualidad las dos economías más grandes del mundo. En eso y en la evolución tecnológica que supone un pulso constante entre ambas naciones y mantiene al mundo en vilo.